Se prepara un plan para crear bosques urbanos con medio millón de árboles
Zaragoza 15 de Diciembre de 2020
Un árbol por cada zaragozano. Ese es el objetivo que se ha marcado el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, para poner en marcha un ambicioso plan de reforestación que podría suponer la plantación de medio millón de árboles a medio y largo plazo hasta alcanzar los 700.000 ejemplares, más del triple de la masa forestal urbana actual. El gobierno municipal quiere crear bosques en la ciudad consolidada con los que recuperar parcelas públicas sin uso y mejorar la calidad medioambiental de la capital aragonesa. Para ello, se contaría con la participación ciudadana y se utilizaría el compost producido con los residuos orgánicos, cuya recogida se extenderá a todos los barrios en 2021.
El Ayuntamiento ya se ha puesto en marcha y ha licitado una asistencia técnica que determinará el número final de árboles, su especie, las ubicaciones elegidas y el calendario a seguir. En cualquier caso, la coalición PP-Cs tiene claro que quiere impulsar una recuperación de terrenos municipales que, mediante la plantación masiva, sirvan de nexo de unión entre la ciudad consolidada y los espacios naturales, ayuden a la absorción de CO2 y se conviertan en rincones de ocio para los vecinos.
Incluso se manejan ya algunas posibles ubicaciones. Por ejemplo, el Consistorio prevé crear un bosque urbano en el entorno de la calle de San Juan Bautista de La Salle, junto a la margen derecha del Canal Imperial. Se trata de una cuña de terreno sin uso de origen agrario. “Por sus características y dimensión, puede tener la consideración de intervención ‘modelo’”, según detalla el contrato menor de la asistencia técnica.
Allí se quiere crear uno de los primeros bosques urbanos del proyecto, que igualmente contempla intervenciones junto al colegio de Santa Ana, también en las inmediaciones del Canal, en el entorno de la depuradora de La Cartuja (en este caso, vinculado al nuevo contrato de gestión) o en el corredor verde pendiente de ejecutar entre los barrios de Las Delicias y La Almozara. También se estudia actuar en las riberas del Huerva, por ejemplo en los antiguos viveros Sopesens, aunque este río podría contar con su propio plan especial. O en el polígono de Malpica, aunque no estaría entre los objetivos prioritarios.
En cualquier caso, se pretende actuar de manera general en lugares “cercanos a las zonas verdes urbanas, para dar continuidad al movimiento de la fauna que habita en ellas”, señala el contrato, que asimismo apunta que las parcelas municipales elegidas tendrán “tamaño suficiente como para generar un hábitat para especies animales y vegetales autóctonas”.
Programas escolares
Para todo ello, el gobierno quiere contar con la participación ciudadana. En concreto, se prevé recuperar los programas escolares de plantación de árboles, cancelados en la anterior corporación, pero también habilitar canales para que cualquier vecino o empresa que lo desee pueda contribuir, de manera ordenada, a la expansión de la masa forestal urbana de la ciudad.
Zaragoza cuenta con 165.000 árboles en zonas urbanas controlados por las respectivas contratas, mientras que en el conjunto del término municipal, uno de los más grandes de España, hay 1.125.000 ejemplares. Entre las zonas con mayor masa forestal se encuentra el Monte Vedado de Peñaflor (431.000 árboles), los Montes de Torrero (264.000) o Acampo Hospital (96.000).
Tras una época de expansión, con la clausura de la Expo de 2008 se desplomaron las intervenciones, en especial durante el anterior mandato de ZEC.
En concreto, si desde 2003 a 2015 la media anual de plantación se situó en 26.241 árboles, en la última corporación esa cifra bajó hasta los 845 por ejercicio. Ahora la coalición PP-Cs quiere revertir esta tendencia a la baja con actuaciones anuales, con su correspondiente partida presupuestaria.
En este sentido, se prevé que el presupuesto de 2021 ya cuente con una reserva de fondos que dé el pistoletazo de salida, en especial a partir del otoño con la vuelta de los alumnos a los colegios e institutos, donde se retomarían los programas de plantación.
Eso sí, dada la magnitud del proyecto, el calendario previsto va más allá del actual mandato. El gobierno se ha propuesto plantar “todos los árboles posibles”, pero apunta que se trata de un plan “a medio y largo plazo” que podría alcanzar una década. En cualquier caso, fuentes municipales consideran que se trata de una iniciativa que debería contar con el respaldo del resto de formaciones, al estar en la línea de los objetivos y políticas medioambientales vigentes hoy en día.
Además, en el plan tendrá un papel muy importante el uso de biorresiduos. En concreto, se prevé utilizar el compost generado a través de la recogida de desperdicios orgánicos de los hogares y empresas de la ciudad. Tras dos pruebas piloto en el Actur y en el entorno de la avenida de Goya, el Consistorio extenderá la recogida selectiva a todos los barrios el próximo año, tal y como obliga la normativa europea.
Con dicho material orgánico, así como con los restos vegetales del mantenimiento de los parques y zonas verdes, se abonarán las parcelas objeto de intervención, de forma que “se cierre el círculo de aprovechamiento de los residuos”, apuntan desde el gobierno municipal.