Así será la adecuación de la Torre del Agua

Zaragoza 21 de Septiembre de 2024

El Gobierno de Aragón prevé invertir siete millones en las obras, que se alargarán hasta 2027.

La Torre del Agua se enfrenta a una operación de cirugía para arreglar sus achaques tras 16 años de abandono, imprescindible para su posterior acondicionamiento como espacio de exposiciones y eventos. La intervención planificada por el Gobierno requerirá de una inversión de siete millones y permitirá su reapertura en el primer trimestre de 2027.

La adecuación se centrará en los sótanos, zócalo, fuste, fachada y cubierta de uno de los iconos de la Expo 2008, que se pretende transformar en “faro de la logística”. Las obras de esta primera fase se solaparán con las previstas en la segunda, centradas en la renovación de su iluminación por un sistema led más eficiente, que empezarán seis meses después.

Las obras de adecuación del edificio, de 76 metros, requerirán una inyección inicial de 3,5 millones, a la que se sumará una cuantía similar para el ambicioso proyecto de iluminación de su característica forma de gota. El actual sistema de fluorescencia será sustituido por otro de puntos leds, más eficiente y con mayores posibilidades creativas.

Se cumplirá así la vieja aspiración de que alguna de sus partes más visibles sirvan para la proyección de vídeo y de imágenes dinámicas, como se hace desde hace años en el cercano edificio de Etopía, junto a la estación de Delicias.

El consejero de Fomento y presidente de la sociedad pública Expo Zaragoza Empresarial, Octavio López, adelantó el pasado verano que el proyecto incluirá la adecuación de la antigua cafetería de la última planta como restaurante con el objetivo de que su explotación salga a concesión. De la misma forma, se pretende abrir la cubierta como terraza.

Los 4.000 metros cuadrados del zócalo se pretenden utilizar como sala multiusos, tanto para exposiciones temporales como para la organización de eventos. Mientras tanto, los espacios que se van intercalando a lo largo del cuerpo de la Torre del Agua formarán parte de un espacio expositivo permanente relacionado con la logística, la energía y el agua.

Una de las principales actuaciones será la subsanación de las filtraciones puntuales a través de la fachada, así como repasar el sellado de las juntas, muy deteriorado. También se deberán reponer algunos de los once perfiles diagonales adheridos al vidrio.

Otro de los elementos en los que se deberá intervenir son los parasoles, en los que ha aparecido óxido en las ménsulas de soporte y en las pasarelas de mantenimiento. 

Las filtraciones en la cubierta del zócalo del edificio es otro de los puntos de la larga lista de actuaciones, al igual que las detectadas en el sótano 1 y que proceden de la urbanización de la zona superior del canal de aguas bravas.

El restaurante-mirador previsto en el espacio de cafetería que coronaba la Torre del Agua durante la Expo necesitará mejorar la visibilidad a través de la fachada. Con esta idea, se plantea sustituir la barandilla opaca por otra acristalada y ganar “esbeltez en la celosía estructural”. Para ello, se reducirá su sección “aprovechando el avance técnico en los materiales de protección al fuego”, según se especifica el pliego de prescripciones técnicas. 

Para acondicionar la cocina se cuenta con la planta técnica situada justamente debajo, en la que también deberán ir los servicios. “Se dotará de una salida de humos adecuada y de la preinstalación de montaplatos para servicio de la sala”, añade.

Fuente: Heraldo.es