El Parque del Agua se llena
Zaragoza 13 de Agosto de 2018
Diez años después de su estreno, el Parque del Agua Luis Buñuel por fin vislumbra su culminación definitiva con el último edificio que quedaba por activar. Se trata del ya famoso apartotel de la Expo, que lució inacabado durante los 93 días de la muestra y los nueve años siguientes. Ahora está a solo «un mes y medio» de terminar las obras de reconversión en una residencia de mayores de última generación, impulsada por una firma privada, Vitalia Plus, que ha invertido «unos nueve millones de euros» en resucitarlo.
Los trabajos empiezan a mostrar una apariencia más próxima a la definitiva, la de un proyecto que dará cabida a 235 plazas y alojará un centro de día. Con «unas vistas increíbles al Pirineo, el recinto Expo y el Parque del Agua», la firma pretende poner en funcionamiento este centro en el que introducir un «cambio de modelo» en el formato tradicional de estos centros. El objetivo es que «pueda estar operativo antes de final de año» pero esta fecha es aún la más incierta porque faltará, tras la ejecución, obtener las pertinentes autorizaciones y licencias en la DGA y el Ayuntamiento de Zaragoza.
Contiene habitaciones individuales entre la segunda y quinta planta, y «unidades de convivencia en la planta baja y la primera». Y en la rasante de la entrada, «ocho pisos con módulos de cocina propios y un ambiente hogareño». Porque el espíritu de esta residencia es ir más allá de la estancia, se trata de fomentar cierta autonomía y actividad en los habitantes de este edificio. Para que se sientan como en casa o que, al menos, sean menos visibles las limitaciones propias de la edad. Todo ello desde una habitación individual o doble con usos compartidos, o los apartamentos o hasta una suite que se están creando. «Todo con vistas al exterior», añaden desde la empresa.
Del parón a la resurrección
Atrás quedaron los nueve largos años en el olvido de un apartotel que iba a ser un negocio dedicado al turismo, que se adjudicó a la firma Geexpark antes del 2008. Una concesión pública que acabó devorada por la quiebra de sus gestores y varada para siempre a escasos metros de los otros negocios con los que también se hizo la firma, el centro termal sobre todo.
Ahora renace una edificación a la que los trabajos ya le están dando forma definitiva en la fachada (ya han cubierto dos de las cuatro) y en el interior, donde la estructura como establecimiento turístico ha condicionado mucho el reparto de espacios para la futura residencia. Al menos se ha aprovechado casi todo de una obra que quedó aparcada por Geexpark a pocos meses de abrir las puertas la Expo. Su recuperación para el uso de los zaragozanos se da en una ciudad en la «que existe una fuerte demanda» de plazas en residencias. Las públicas no absorben toda la que hay y estas ofrecen un plus de comodidades a un coste superior.
Pero en lo que respecta a la recuperación de este vacío urbano pegado al Parque del Agua, estos días se puede constatar recorriendo la obra cómo los pasillos y estancias se aproximan a su apariencia definitiva, casi listos para recibir el mobiliario. La instalación eléctrica se une a la climatización (puede generar su calefacción con la planta instalada en el sótano y placas solares). Apura su puesta a punto para abrir y, con ello, el Parque del Agua dejará de estar inacabado.
Fuente: El periodico de Aragón