El Pabellón Puente vuelve a fluir sobre el Ebro como museo de la movilidad
Zaragoza 20 de Febrero de 2023
El Pabellón Puente vuelve a la vida. Tras permanecer cerrado más de 5.000 días, los 15 años transcurridos desde que finalizó la Expo de Zaragoza de 2008, este joya arquitectónica diseñada por la célebre arquitecta angloiraquí Zaha Hadid, la primera mujer que recibió el Premio Pritzker, resucita reconvertido en el Mobility City. Se trata de un espacio de exhibición y divulgación impulsado por la Fundación Ibercaja, en colaboración con el Gobierno de Aragón, que aspira a convertirse en un referente internacional de la movilidad sostenible del futuro dentro de los nuevos parámetros que demandan los tiempos. Este sugerente edificio, en cuya reconversión se han invertido casi 8 millones de euros, será también un lugar de paseo ciudadano por el que cruzar el Ebro de orilla a orilla.
El acto de inauguración del centro, que se convierte además en un atractivo turístico de primer nivel para la capital aragonesa, ha sido presidido este lunes por el Rey Felipe VI, que ha estado acompañado de la ministra de Industria, Reyes Maroto, el presidente de la comunidad, Javier Lambán, y el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, así como otros representantes políticos y de instituciones y empresas colaboradoras del proyecto.
Un total de 300 personas se han sumado a un acontecimiento que ha tenido como anfitriones a Amado Franco y José Luis Rodrigo, como presidente y director general de la Fundación Ibercaja, respectivamente, que han sido los encargados de recibir al monarca. Posteriormente, Felipe VI ha saludado a los miembros del patronato de Fundación Ibercaja y a la dirección de Ibercaja Banco, así como a la nutrida representación de empresas y entidades que colaboran con Mobility City, antes de iniciar un recorrido por las instalaciones.
Tras conocer el museo, que ha sorprendido gratamente a la comitiva, se ha procedido al descubrimiento de la placa conmemorativa de la inauguración. En ese momento ha tomado la palabra Amado Franco , que ha agradecido al Rey que haya aceptado presidir este acto. “Es un gran refrendo pero todavía nos compromete más para que sea una éxito”, ha afirmado.
El origen del proyecto se remonta a antes del año 2008, cuando Ibercaja, recordó Franco, adquirió el «compromiso» de ayudar a la concesión de la Expo y «dar utilidad» a este edificio emblemático. Sin embargo, la iniciativa se frenó con la «tremenda» crisis económica que se desencadenó tras el fin del muestra, que «se llevó delante muchos cosas y la mayor parte de las cajas de ahorros», pero no Ibercaja, que sigue gozando de buena salud. «Por fin ha llegado el día en el que Mobility City está listo para ser devuelto a la sociedad aragonesa», ha subrayado.
Un precio “simbólico” de 5 a 10 euros
“Esperamos que Mobility City se convierta en un foro de debate sobre los retos de la movilidad del futuro”, ha expresado José Luis Rodrigo, director general de la Fundación Ibercaja, una de las instituciones que ha sido parte fundamental de esta nueva cara de la obra de la arquitecta Zaha Hadid.
La puesta de largo del Mobility Museum ha contado con más de un centenar de autoridades con Felipe VI como padrino del evento y la ministra de Industria, Reyes Maroto, como representante del Gobierno de España.
La fecha marcada en rojo en el calendario para la apertura de puertas al gran público será el 3 de marzo, el viernes previo al puente de la Cincomarzada, festivo en Zaragoza. Rodrigo no ha desvelado el precio de la entrada, aunque sí ha adelantado que será una cantidad “simbólica”, de entre 5 y 10 euros para los adultos. No obstante, los chicos y chicas de los colegios de Zaragoza podrán visitarlo durante estos 10 días previos de la mano del Tour del Talento de la Fundación Princesa de Girona, que esta semana visita la capital aragonesa.
Preguntado por un objetivo de visitantes, el director general de Fundación Ibercaja se ha puesto como base las 100.000 personas al año, cifra que tiene en estos momentos el museo Goya.
Un viaje del pasado al futuro
El Mobility Museum contará con 4 zonas. La primera será un espacio dedicado a los vehículos más icónicos que han marcado la historia del siglo XX. También habrá otro lugar centrado en la innovación con aportaciones españolas como el taxi dron, el hiperloop o prototipos de micromovilidad. Una tercera zona estará centrada en la industria de los componentes de automoción para finalmente, abordar el los retos del futuro con actividades que buscarán poner al visitante en el centro, como simuladores a través de la realidad virtual.
Javier Lambán, presidente de Aragón, ha asegurado que este proyecto es “un canto a la colaboración pública y privada” y que es “el mejor camino que debe recorrer una país para alcanzar objetivos ambiciosos”, ha posicionado a Aragón como “un referente de la movilidad del futuro” y recuerda que la planta de Stellantis en Figueruelas fue la primera en España en fabricar en serie un turismo eléctrico.
En este sentido, Lambán ha recalcado que el automóvil supone una parte importante del PIB y el empleo de Aragón, que es uno de los líderes de esta industria a nivel nacional. Por ello, se ha mostrado convencido de que la comunidad captará una gigafactoría: “Hay varias posibilidades . Estoy seguro de que Aragón tendrá una Fábrica de baterías”.
Recuperar el legado de la Expo
La reapertura del Pabellón Puente, según el presidente aragonés, supone también recuperar el “legado material y político” de la Expo 2008, cuya exitosa celebración ha atribuido al exalcalde de Zaragoza Juan Alberto Belloch, al que ha loado en varias ocasiones en su discurso. “Es el político aragonés más relevante del siglo XXI”, ha aseverado. A este respecto, ha señalado que el antiguo complejo expositivo esta ocupado por un gran número de empresas y en fututo próximo vivienda de alquiler para jóvenes.
No obstante, ha reconocido que existen “cuestiones por resolver” para la completar la reconversión y revitalización del espacio situado en el meandro de Ranillas, ya que edificios emblemáticos como la Torre del Agua o los pabellones de Aragón u España siguen en desuso 15 años después de finalizar la Expo de Zaragoza.
El legado perdido: los otros iconos de 2008, «cuestiones por resolver»
La reapertura del Pabellón Puente, tras llevar 15 años prácticamente sin uso, pone el foco sobre la situación de abandono de otros iconos de la muestra internacional Expo Zaragoza 2008 como la Torre del Agua o los pabellones de España y Aragón, a los que no se ha conseguido dar una segunda vida. «Nos quedan algunas cuestiones por resolver», reconoció ayer el propio presidente de Aragón, Javier Lambán, en el acto de inauguración del Mobility City en referencia al letargo en que están sumido esos edificios emblemáticos, lo que no ha permitido completar la reconversión del recinto de Ranillas.
No obstante, defendió que la recuperación del Pabellón Puente se ha resuelto de «manera admirable» convertido en un museo de la movilidad. Este espacio actualizado significa además, dijo, «darle forma a lo que está llamado a ser el Centro Aragonés del Talento», que situó en esta parte de la ciudad. Los otros tres iconos no han tenido la misma suerte que el edificio diseñado por Zaha Hadid. Para la Torre del Agua, se formalizó la cesión del edificio a la CAI a la vez que el Pabellón Puente se entregaba a Ibercaja. Pero en 2013, con la primera entidad ya absorbida por la segunda, se renunció al icono diseñado por Enrique de Teresa y a su musealización a cambio de indemnizar a Expo Zaragoza Empresarial con más de 400.000 euros.
El Pabellón de España, del Gobierno Central y diseñado por Patxi Mangado, iba a ser, según se anunció en la Expo, el Instituto de Investigación sobre el Cambio Climático del que, tras la muestra, nunca más se supo. Y después se negoció un posible uso universitario, con el campus público o privado, o su cesión a la DGA. Pero nada. Y el Pabellón de Aragón, que lleva la firma de Olano y Mendo, está cerrado a cal y canto desde que acabó la Expo. Se estudió como posible sede de la Consejería de Educación, ya instalada en el parque empresarial.
Fuente: El Periodico de Aragon
